- Editorial:
- UNIVERSIDAD DE SAN MARTÍN DE PORRES
- Año de edición:
- 2013
- Materia
- Gastronomía
- ISBN:
- 978-612-4088-92-6
- Páginas:
- 165
- Encuadernación:
- Cartoné
VINO Y PISCO EN LA HISTORIA DEL PERÚ
DARGENT CHAMONT, EDUARDO
En los últimos años los peruanos hemos visto un desbordante renacimiento de la vitivinicultura nacional en la que ha sido de vital importancia, el tesón de los agricultores y el empeño destacado de las empresas dedicadas al rubro que no han escatimado en invertir capitales importantes en modernos equipos, nuevas cepas y contratacion de expertos.
Ha habido un redescubrimiento del pisco, creciendo cada vez más la oferta en calidad y en consumo responsable de quienes saben reconocer un producto optimo. Se ha dejado la costumbre ominosa del "seco y volteado" para pasar mayoritariamente a la degustación. Se ha desarrollado, además, un gusto por la coctelería en base a pisco.
El actual desarrollo del vino y del pisco justifica hacer un recuento de los origenes, la importancia y la problematica que ha recorrido nuestra industria de la uva a lo largo de más de cuatro siglos y medio. Joseph de Acosta, el cronista, cuenta que cuando dejo el Perú ya se producian muchos y buenos vinos, y que habría sido en nuestro país donde se lograron los primeros del continente americano. Otros cronistas mencionan cómo de estas tierras, las vides avanzaron con los conquistadores a los demas territorios de Sudamérica que iban ocupando, tierras en las que fructificaron con exito.
En los 466 años que han transcurrido desde las primeras uvas que vio Pedro Cieza de Leon en 1547, durante su recorrido por los valles del norte del país, la viticultura nacional ha pasado por distintos momentos de crecimiento y decadencia. Estos ciclos gobernados por factores climáticos, económicos y politicos, dejaron profundas huellas, pero siempre la industria salio adelante.
Este año se celebra una fecha especialmente grata para los amantes de las uvas y sus derivados, pues se cumplen 400 anos de lo que hasta ahora es la noticia más antigua que se tiene de la elaboración del pisco. Efectivamente, en el año 1613, un griego, llamado Pedro Manuel, oriundo de Corfu, hizo su testamento en la ciudad de Ica y en el deja especificado un numero de envases de aguardiente de uva así como del equipo requerido para destilarlo.
Con el presente libro se intenta hacer un recorrido por los cuatro siglos y medio que convivimos con esta planta profana y sagrada que es la vid, al lado de los cronistas y viajeros que vieron de primera mano el desarrollo de la uva y sus derivados. Hemos tambien rebuscado los informes de técnicos y curiosos publicados en periodicos y libros, dando como resultado una verdadera saga de hombres y mujeres comprometidos y festivos en el proceso que va desde el trabajo de la tierra hasta el consumo pasando por la transformación y comercialización de nuestros vinos y piscos.