La novela de María Teresa Grillo transcurre a lo largo del siglo veinte en el Perú. Los personajes llegan a Lima desde Europa, los Andes e Iquique y se entremezclan en una hermosa historia de amor. Tres generaciones se suceden en una arrogante capital que muestra sus aristas, disparidades y la corrupción del sistema político. Los encuentros y desencuentros de entrañables personajes se convierten en una metáfora de nuestro conflictuado país.