Mía es una niña muy curiosa que siempre quiso
adoptar un perrito que tuviera superpoderes.
Cuando el pequeño y peludo Max llega en los
brazos de su papá, ella está segura de que ese
será el inicio de una gran amistad. Y no solo
eso: la presencia de la mascota en la familia de
Mía les dejará algunas lecciones que les servirán para toda la vida.