En una época tan compleja como la nuestra es clave el conocimiento de quién, qué y cómo somos. Sería sorprendente que en la llamada sociedad del conocimiento el ser humano pueda andar todo el día y todos los días empeñado en conocer lo externo y permanecer ignorante respecto de sí mismo, de su propio ser, e incluso irse de este mundo siendo un gran desconocido para sí. Sin embargo, todo hombre es en cierto modo un filósofo, ya que posee inteligencia, y, por tanto, cabe preguntarse: ¿Quién y cómo es el que tengo al lado?, ¿Cómo puedo aprovechar mejor mis posibilidades de desarrollo?, ¿Cuál es el sentido de mi vida? Justamente la Antropología filosófica trata de responder a estas interrogantes de una manera radical y es lo que tratamos de exponer en el presente texto que toa los temas en profundidad pero también de modo accesible para todos.
